Oportunidad para un Nuevo Alcalde en San Pedro de Macorís


ARITUCLO DE OPINION

Por Jorge de León 

En medio del aspaviento y efervescencia de obras en el municipio de la serie veintitrés, pero todas de carácter gubernamental, en términos de inversión; queda la nube gris de la incertidumbre en el manejo de los fondos recibidos por el ayuntamiento, sin poder observar obras de impacto en el espectro municipal con la inversión de los recursos destinados directamente para la alcaldía.

Aceras, contenes, murales, compra ocasional de equipos , vehículos y utilería; además de un contrato para la recolección de los desechos sólidos en el municipio, cuestionado hasta por entidades fiscalizadoras gubernamentales e independientes; son de las pocas las “lucecitas” que pueden alumbrar un túnel sin salida en el trasiego del recorrido para el actual ejecutivo y sus departamentales frente a la gestión municipal; descrito en palabras simples, no se puede palpar la inversión directa de la alcaldía en el municipio. 

Una política de impacto social minimizada, acudiendo al simple hecho de la multiplicidad, reproducción y promoción pagada de material audiovisual en las redes sociales, plataformas que sin dudas son determinantes para afianzar la colocación de la institución y de la figura del ejecutivo; pero que a la vez, sirven, para que los munícipes se conviertan en jueces, dictando sentencias en las que promulgan incumplimiento de obras en los diferentes sectores de la Sultana del Este, además de manejos oscuros en términos de aplicación del presupuesto participativo; afianzamos esta aseveración en base a las denuncias de varios presidentes de juntas de vecinos, todas hechas públicas en medios digitales, radiales y televisivos. 

Y es que mientras el actual alcalde se goza la pasarela de los aplausos de sus súbditos, que defienden lo correcto, aunque es muy poco y lo incorrecto, que sobreabunda; se dan escenarios políticos dentro de su organización y en las principales de oposición, que abren la ventana para que el palacio municipal petromacorisano tenga un nuevo huésped a partir del 24 de abril de 2024. 

Dentro del partido de gobierno, en el municipio de San Pedro Macorís, existe un actor municipal, que fuera de la emotividad y ansiedad de cambio de las elecciones pasadas, pudo llevar al PRM a una posición clasificable en procesos anteriores, con una cantidad de votos considerable, frente a un PLD y PRD(quien tenía la curul) unidos; ante un síndico, desgastado, según una gran parte de la sociedad; pero que sabía conjugar el verbo del triunfo, con la participación de todos los sectores, por su gran legado de credibilidad; este personaje es Héctor Luis Febles, el Primo, a quien hay que ponerle atención. 

Se suman dentro de las lides del oficialismo para el cargo municipal otros actores, pero el más importante, denominado por muchos como la revelación política de Macorís en este cuatrienio, el empresario de los equipos pesados y actual regidor, Luichy de la Cruz, quien ha sido tomado en cuenta paras mediciones, donde de forma misteriosa, sin andar en proselitismo marca números considerables para estar haciendo “pininos”, además goza de una conexión popular autóctona y natural, que ha creado preocupaciones dentro del grupo de los que gobiernan actualmente la municipalidad. 

Fuera de los blanco con azul, en la oposición, la impresionante consistencia del experimentado Sergio Cedeño de la Fuerza del Pueblo, lo colocan con números muy buenos para ser contrincante, adhiriéndole a esto la sombra del actual senador que goza de una popularidad, simpatía e intención de votos, que me atrevo a decir, nadie más la tiene en todo la provincia ni en el municipio cabecera; se suman la corriente peledeísta, donde la Doña de la Loma nunca deja de ser opción y que ahora, se adorna con el “piquete” de la recién llegada Fiordaliza Peguero(Hillary), que con su poderío y chispa política pudiera salir al ruedo municipal. 

Es que el escenario se divide mucho y sería más fácil coaligar, hacer alianzas frontales o estratégicas, desde la oposición, en aras de tomar el poder municipal; a partir del próximo mes de febrero, todo escenario de comodidad para el actual incumbente, variará en un giro de 360 grados, porque los de afuera saben sumar y tienen bien claro que los números por sí solo, al alcalde no le dan. 

Todo esto, de manera combinada, visto con raciocinio político, lógica elemental y experiencia en el manejo de los procesos electorales, nos dice, que se abre una oportunidad para un nuevo alcalde en San Pedro de Macorís de cara a las elecciones de 2024.  Que nos diga el tiempo.

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